A las 11.00 horas de ayer lunes, el avión que traía al candidato de la izquierda chilena se posó en la capital de Los Ríos. Las banderas de la IC, PS Allendista, Izquierda 21 y PC flameaban en Pichoy, donde una caravana de vehículos saludó a Jorge Arrate a su llegada y lo escoltó hasta la Plaza de la República, donde comenzó a recibir la calidez  del respaldo tanto de sus adherentes como de quienes se acercaban espontáneamente  a saludarlo.
La comitiva avanzó por calle Libertad con vítores y banderas enarboladas, hasta un micrófono al aire libre donde Jorge Arrate recibió las preguntas de la prensa local para posteriormente dirigirse a la sala Ainilebu. Allí fue presentado por el otrora alcalde más joven de Chile, Luis Díaz Bórquez.
En la oportunidad se encontraban representantes de los partidos que conforman el Juntos Podemos Más, quienes lo acompañaron en la mesa, mientras se dirigía a la concurrencia que repletó la sala.
Arrate habló de lo intensas que han sido las jornadas de campaña electoral, recorridos que le han enriquecido su mirada, según expresó. Se manifestó “orgulloso de dialogar con el pasado e ir inventando futuro desde el legado histórico de la izquierda”.
«Igualdad, lealtad y fraternidad son ideales que hemos seguido durante siglos», manifestó, al mismo tiempo que se remontaba hace unos meses atrás, cuando nadie imaginaba que un candidato de 68 años tendría tanta adhesión por parte de la juventud.
«La edad no importa, como dijo Allende una vez…hay jóvenes viejos y hay viejos jóvenes, y él se consideraba de los segundos»
Señaló que la campaña “transmite ideales, principios, doctrina, razones y pasiones….eso es lo que se ha estado haciendo con paciencia, constancia y muy pocos recursos materiales”.
En su recorrido por Chile –dijo- le da mucha alegría encontrarse con la diversidad de rayados, colores, letras….todos ellos pintados por voluntarios, seres humanos con conciencia. Destacó que quienes producen la franja presidencial son partidarios de su candidatura, así como también los actores que participan en ella. “Se cuentan con los dedos de la mano quienes reciben alguna remuneración. La campaña se está haciendo desde el corazón”, dijo.
Fue ampliamente aplaudido cuando dijo “el socialista vota socialista”, ilustrando la pérdida de los votos de la candidatura de Frei , sobre todo porque este no ha enfrentado claramente el tema del cobre en su campaña, tema sensible para los seguidores de Allende.
«El color naranja es un color que la izquierda había ganado.Y es un color que tiene que estar entre nosotros «. Con esa frase manifestó su alegría de que concejales y militantes humanistas hayan hecho público el apoyo a su candidatura.
«Yo no soy de los que dicen que no se ha hecho nada en estos años, como dice la derecha. Se han hecho cosas y hay que valorarlas, pero se ha hecho mucho menos de lo que un día, en una plaza de Antofagasta, dijimos que haríamos».
Se refirió específicamente a recuperar la riqueza del cobre, que solucionaría los problemas de vivienda, salud y educación.
Arrate llamó a votar en primera vuelta con la frente en alto por lo que un@ cree y piensa: “hay que votar por lo que dignifica sin empeñar su dignidad”.
Finalmente, el presidenciable recibió el saludo de la presidenta de la FENATS histórica, Yolanda Ramírez; de la CUT, representada por Patricio Illanes y Jorge Lara y del vicepresidente de la FEUACH, Rodrigo Cósimo.
Un momento emotivo vivió Jorge Arrate cuando al salir de la sala Ainilebu fue requerido por su gran amigo German Arestizábal, artista plástico, con el cual compartieron unos momentos.
Las pocas horas que Jorge Arrate estuvo en Valdivia fueron intensas. Durante ellas también compartió un masivo almuerzo con sus adherentes y posteriormente, antes de dirigirse a la ciudad de Osorno, fue entrevistado en los estudios de radio Regional Nuevo Mundo.
Sin duda un día inolvidable para quienes añoraban su visita y creen aún en los sueños de un Chile para todos y todas.
Marisol Molina





