Momentos de emociones contrapuestas son las que está viviendo en estos momentos el Padre Martín koenigstein en su parroquia, ya que en unos días más deberá viajar a Alemania para fijar, de manera permanente, su residencia en ese país.
Es así que el fin de semana pasado preparó su última Eucaristía en nuestra ciudad antes de emprender vuelo al viejo continente.
Al comenzar la Comunión, se le vio al Religioso muy emocionado al momento de recibir a sus feligreses, que al mismo tiempo lo iban saludando con evidentes muestras de alegría y cariño.
En la Homilía, el Padre confesó emocionadamente: «Hay momentos para salir de la familia y conocer distintas realidades, pero también hay momentos para volver a ellos y estar con quienes crecí como niño y como joven». A su vez también recordó cómo él mismo había realizado sus votos perpetuos en este templo y su ordenación Sacerdotal: “Esta despedida es una celebración hermosa de acción de gracias, ya que en este momento, en el templo donde ahora me despido, se encuentran personas que estuvieron en el día de mi ordenación y que realicé mis votos perpetuos”.
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Felipe Hernandez.