En un repentino giro, el único imputado por el caso en la muerte del conscripto asesinado en una discoteca de la comuna, Luis Candia, acaba de dejar la medida de prisión preventiva que había estipulado la corte de apelaciones, para ser cambiada por la de arresto domiciliario. Situación que obviamente complicó a los familiares de la malograda víctima.
Así lo manifestó a los medios, la madre de Marco Antonio Rodríguez, Teresa Salas. Según los datos proporcionados, el hecho ocurrió el reciente fin de semana: “esta medida tomada por la justicia nos tiene más que preocupados; si bien se determinó el arresto domiciliario, no sabemos si esta medida la cumplirá cabalmente, pese a que carabineros se encargará de hacerlo. Nosotros ya no creemos en la justicia, perdió toda credibilidad para mí y para nosotros. Este asunto nos da impotencia y rabia. Sabemos que Ignacio morales –el otro involucrado- ya está libre y ahora se presenta esto. En estos momentos debe estar muerto dela risa en su casa”.
Otra de las molestias que presentan los familiares, es de la nula comunicación que tuvo el tribunal para informarle, a través de su abogado, de la nueva situación que se estaba generando: “no hubiera costado nada. Yo estoy pagando a un abogado, mientras el delincuente tiene a una defensoría gratis. Yo esto lo supe de casualidad. Entiendo a la defensoría, pero creo que se pusieron de parte de este delincuente. El abogado defensor apeló por esta medida, es injusto”.
“El otro involucrado está libre, le pido a la ciudadanía que se cuide de él, porque la justicia no está actuando como debe. Tengo impotencia, estoy con medicamentos, con Psicólogo y la justicia me pega la puñalada por detrás, dejando prácticamente libre a estas dos personas ¿En quién me queda creer?”.
A la vez, Teresa Rodríguez ha pedido y solicitado –y a través de su abogado- una serie de diligencias para investigar, entre ellas una reconstitución de escena, pero estas han sido dadas como ‘No a Lugar’, por lo que le ha parecido un proceso muy injusto para quienes debieron sufrir la muerte de un hijo al que no volverán a ver, en contraste con quienes han sido acusados del homicidio, que prácticamente están en libertad.
Asimismo, quiere dejar en claro lo irregular del caso, pues el imputado ha cambiado en una serie de oportunidades de testigos. “Los delincuentes tienen todas las garantías y las víctimas al parecer no”, terminó diciendo.