(Actualizada) Innumerables llamados de vecinos que denunciaban los malos olores que se hacían sentir en el centro de la ciudad, se presentaron en el día de hoy.
Durante las primeras horas de esta mañana, extrañas emanaciones con fuertes olores, son los que se hicieron sentir en el sector céntrico de La Unión. Este incidente, dio motivo para que decenas de vecinos protestaran por un fenómeno al que no están acostumbrados. Las emanaciones, aparte de las molestias nasales que presentaban a quien transitara por aquel sector, igualmente presentaban un posible dilema mayor: la peligrosidad que podían revestir si la fuente provenía de una tubería en mal estado o de un conducto de gas.
Es por ello que quisimos percatarnos personalmente de este hecho; lo que efectivamente resultó cierto, pues era evidente la presencia de estos hedores. En el transcurso de nuestra investigación, éstos fueron algunos de los testimonios e impresiones que recogimos por parte de quienes transitaban por el lugar:
Mario Catalán: “Es muy fuerte el olor, pero esto siempre ha pasado y las autoridades no hacen nada para regular esta situación. Nosotros los que trabajamos aquí en el centro, somos los que sufrimos en nuestros locales, ya que ni siquiera se pueden abrir las puertas o ventanas para que este olor salga”.
Juan Carlos Martel: “Si, es irreparable. Esto seguramente son purines que aplican a las praderas y el viento se encarga de hacer llegar estos olores que son muy desagradable y realmente las autoridades deberían hacer algo al respecto”.
Versiones encontradas
Buscando una solución al problema de los malos olores en la comuna, decidimos concurrir al Servicio de Salud de La Unión, intentando encontrar una respuesta que dilucidara la situación.
En el lugar, una funcionaria de la institución nos señaló que el tema de las emanaciones, estaba directamente vinculado con el SAG, “porque corresponde al trabajo que se realiza en los campos con la aplicación de purines”. Además indicó en la oportunidad, que hasta el momento tenía varias denuncias sobre este problema.
Una vez terminada la entrevista con la funcionaria, decidimos comunicarnos por teléfono con las oficinas del SAG en Río Bueno, a modo de llegar al fondo del problema. En la ocasión, esto fue lo que nos señaló uno de sus autoridades:
“Respecto a la situación, debo comentarte que los malos olores que puedan originarse por la aplicación de purines en praderas muy cercanas a un centro urbano, es un tema que debe fiscalizar la Autoridad Sanitaria, pues puede relacionarse con una mayor presencia de moscas, las que son vectores de diversas enfermedades que pueden constituir un riesgo para la comunidad, situación que con el aumento de la temperatura ambiente se puede hacer más crítica”.
“Como SAG –continuó- tenemos competencias en la contaminación atmosférica para el caso específico de emisiones de Anhídrido Sulfuroso. En purines, podemos fiscalizar que estos no afecten el agua de bebida para uso animal, cuando se usan aguas provenientes de cursos de agua superficiales o cuando su emisión ponga en riesgo especies de fauna protegidas. Por lo tanto, nos damos por informados y concurrirá un inspector nuestro para identificar la o las fuentes emisoras y sus posibles impactos en materias atingentes a nuestro Servicio”.
Si bien se pudo recabar información valiosa para adentrarnos en este complejo tema y ambas instituciones no dudaron en dar su parecer, aun así no queda tan claro cuál de los dos organismos es el responsable de estas molestas emisiones para la ciudadanía, que lo más probable, seguirán repitiéndose.
Por lo tanto en este caso, dejamos que lector saque sus propias conclusiones…