La Fiscalía Nacional Económica (FNE) presentó un informe al Tribunal de la Libre Competencia (TDLC) en el cual expone argumentos para oponerse a la propuesta de fusión que pusieron a consideración de los organismos antimonopolios las empresas lácteas Nestlé y Soprole, operación que ha sido objeto de debate en círculos políticos y empresariales.
Los argumentos fueron expuestos el viernes 4 recién pasado y conocidos hoy, en lo que se refiere a la consulta realizada por las citadas empresas sobre la operación de concentración consistente en la formación de un joint venture cuya finalidad sería elaborar, comercializar y vender determinados productos lácteos, líquidos y refrigerados, quesos, jugos y néctares de fruta.
El pronunciamiento no es definitivo para la concreción de la operación de fusión, pero sí representa la opinión del organismo clave en materia de competencia, para los efectos del análisis que hará el TDLC al respecto.
El informe de la FNE da cuenta al TDLC de la posición de la entidad en cuanto a que la operación consultada «tenderá a restringir la libre competencia en los mercados de aprovisionamiento de leche cruda y de comercialización de leche líquida, yogur, postres refrigerados, manjar y cremas», dijo un comunicado.
Tras una extensa investigación del mercado lácteo, la FNE concluyó que «el principal riesgo asociado a la operación de concentración es que una eventual materialización del joint venture traería asociados riesgos unilaterales en los mercados de la leche líquida, yogur y postres refrigerados, así como riesgos de carácter coordinado en los mercados de la crema y el manjar».
«Lo anterior significa que de consolidarse el joint venture los consumidores podrían terminar pagando más por dichos productos que lo que pagan en la actualidad», se agregó.
Adicionalmente, en cuanto al aprovisionamiento de leche cruda, el informe advierte al Tribunal acerca de los efectos asociados a la alianza estratégica de los dos principales compradores no cooperados de leche cruda en el país, específicamente, «de cómo el poder de compra que hoy exhiben se vería reforzado de aprobarse la operación de concentración».
«La Fiscalía hace presente la posibilidad de que el joint venture utilice su poder de mercado, entendido como poder de negociación con terceros, con miras a minimizar la presencia de sus actuales competidores en los distintos canales de distribución (supermercados, distribuidores mayoristas y almacenes)», indica el comunicado.
Por último, el informe evalúa las eficiencias y medidas de mitigación propuestas por Nestlé y Soprole, tanto en su consulta como en su escrito de 2 de marzo del año en curso, destacando que «si bien se valora la disposición de las consultantes en ofrecer dichas medidas, las mismas son insuficientes para morigerar de manera sustancial los riesgos identificados».
En síntesis, la entidad es del parecer que la operación consultada «implica la creación de un agente económico dotado de una posición dominante en la industria láctea», capaz de obstaculizar el mantenimiento de una competencia efectiva en los mercados en que opera, «y obrar, en buena medida, de forma independiente con respecto a sus competidores, proveedores y, en último término, de los consumidores».
«De acuerdo a lo expuesto, los riesgos asociados a dicha condición de dominancia no se ven acotados de manera suficiente ni por las eficiencias aducidas, ni por las medidas de mitigación propuestas», se puntualizó finalmente.
Fuente: Emol