La Unidad Nacional de Emergencias Agrícolas y Gestión del Riesgo Agroclimático UNEA, del Ministerio de Agricultura, elabora regularmente un boletín con información aportada por el Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA) y la Dirección Meteorológica de Chile (DMC).
INIA Remehue dio a conocer un extracto del Boletín Agroclimático Nacional del mes de mayo de 2013, en el que analiza la situación agroclimática de las Regiones de Los Ríos y Los Lagos.
Región de Los Ríos
La condición climática durante abril fue de muchas precipitaciones siendo entre 2,4 veces más que las de marzo en el sector de Paillaco (118,9 vs 49,1 mm) y 3,1 veces más en los sectores de Máfil y Río Bueno (111,9 vs 35,6 y 146 vs 47 mm, respectivamente). Agregado a esto, las temperaturas de suelo (a 10 cm) estuvieron por sobre los 13°C, condiciones favorables para el crecimiento de las pradera y cultivos forrajeros de invierno. Esto permitió mantener una buena disponibilidad de materia seca en las praderas de pastoreo y así retrasar el suministro de forrajes conservados.
La situación climática de otoño fue en general muy favorable para el crecimiento de los forrajes de praderas y cultivos suplementarios pero ya en mayo con temperaturas en declinación se pueden afectar las tasas de crecimiento de las plantas. Regularmente en este período, las rotaciones en la pradera se podrían alargar a más de 35-45 días y hacia el invierno cerca de 50-60 días; por lo tanto, los animales más productivos requieren de otros suplementos alimenticios.
El cultivo de maíz para ensilaje ya debiera haberse cosechado; el silo puede abrirse después de 40 días, y es un buen complemento de raciones alimenticias de invierno y en la primavera temprana. Cosechado en forma adecuada (grano pastoso-duro) puede ser un buen aporte con su alto contenido de materia seca (> 30% MS) y de energía (3 Mcal/EM kg MS) además de su elevado rendimiento (17 a 20 ton MS/ha) en corto tiempo (5 a 6 meses) permite sostener mayores cargas animales en el sistema lechero.
Región de Los Lagos
Después del déficit de precipitaciones ocurrido en marzo (-18,7% y -26,7%, en Osorno y Purranque, respectivamente), en abril precipita +36% en Osorno y nuevamente hay un déficit (-14%) en Purranque, respecto de un año promedio. Sin embargo, las temperaturas promedio en superficie han sido mayores en un 3% y 0,3%, para las dos localidades, respectivamente. Se agrega a lo anterior, el menor número de heladas en Osorno (2), respecto del promedio histórico para este mes, de 8,7. Esto permitió tener un muy buen crecimiento otoñal de la pradera y de los cultivos forrajeros para invierno. La calidad nutritiva de las praderas de pastoreo se mantiene en los niveles promedio, teniendo que cuidar el balance energía-proteína, y a veces la suplementación con fibra en los rebrotes con muy baja materia seca.
La situación climática de otoño fue en general muy favorable para el crecimiento de los forrajes de praderas y cultivos suplementarios pero ya en mayo con temperaturas en declinación se pueden afectar las tasas de crecimiento de las plantas. Regularmente en este período, las rotaciones en la pradera se podrían alargar a más de 35-45 días y hacia el invierno cerca de 50-60 días; por lo tanto, los animales más productivos requieren de otros suplementos alimenticios.
El cultivo de maíz para ensilaje ya debiera haberse cosechado; el silo puede abrirse después de 40 días y es un buen complemento de raciones alimenticias de invierno y en la primavera temprana. Cosechado en forma adecuada (grano pastoso-duro) puede ser un buen aporte con alto contenido de materia seca (> 30% MS) y de energía (3 Mcal/EM kg MS) además de su elevado rendimiento (17 a 20 ton MS/ha) en corto tiempo (5 a 6 meses) permite sostener mayores cargas animales en el sistema lechero.
Para ver el informe completo pinche aquí: http://www.minagri.gob.cl/agroclimatico/Informe_Agrometereologio/Informe_agrometeorologico_riesgos.pdf
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Luis Opazo