17 septiembre 2013. El Oficial falleció cumpliendo su deber el 02 de septiembre de 1950 y el cuartel que hoy lleva su nombre, cuenta desde hoy con un espacio que recuerda su ejemplo de servicio.
Para conmemorar los 63 años del fallecimiento del Subteniente Rubén Mogollones Aparicio, la Tenencia que lleva su nombre en Valdivia, al mando del Suboficial Mayor Carlos Sandoval Vásquez, inauguraron la jornada de hoy un hall que lleva su nombre.
El Jefe de la Zona de Carabineros Los Ríos, General Jorge Constanzo Melgarejo presidió la ceremonia de inauguración del espacio que contiene material inédito sobre las circunstancias del fallecimiento del oficial que rindió la vida cumpliendo su promesa de defensa del orden y de la patria.
Concretamente, el hall contiene archivos proporcionados por el Diario “El Correo de Valdivia”, actual Diario Austral; la Biblioteca Municipal; y archivos de la Ilustre Municipalidad de Valdivia, que cuentan cómo fue asesinado en el marco de una fiscalización a un burdel valdiviano, el 02 de septiembre del año 1950.
En su discurso, el suboficial Mayor Sandoval explicó que la instauración de esta sala busca homenajear al Subteniente Mogollones, satisfaciendo las interrogantes que a menudo la comunidad realiza con respecto a las causales del nombre de esta tenencia.
Por su parte, el General Constanzo destacó el ejemplo del joven oficial de 22 años que con valentía y liderazgo demostró los principios y valores con los cuales se ha forjado la historia de Carabineros de Chile.
Historia:
El Subteniente Rubén Mogollones Aparicio nació el 15 de agosto de 1928 e ingresó a la Escuela de Carabineros “Carlos Ibáñez del Campo” el año 1946.
Su primera destinación fue la 11° Comisaria de Estación Central, y posteriormente, en el año 1950, fue destinado a la Primera Comisaria de Valdivia.
En sus funciones de fiscalizar la ley de alcoholes y clandestinos que se escondían en fachadas de casas, el 2 de septiembre 1950, recibió un certero disparo de Luis Cárdenas Carvallo, quien era el propietario de uno de estos locales.
Tras su muerte, sus restos fueron trasladados vía ferrocarril a la ciudad de Santiago, donde ahora descansa en el Cementerio General.
Posteriormente, en el año 1996, y para recordar su ejemplo, se procedió a efectuar el cambio de nominación de la Tenencia José Gil De Castro, por “Tenencia Subteniente Rubén Mogollones Aparicio”.
