Con el grito “queremos respuestas” unas 100 familias, en su mayoría provenientes de sectores rurales de la provincia del Ranco, llegaron a protestar en las oficinas provinciales del Servicio de Vivienda y Urbanismo (Serviu), por los problemas en los sistemas, que han complicado sus postulaciones a los subsidios habitacionales.
“Por eso, nos dicen que tenemos que hacer la postulación de cero y el ahorro se debía duplicar, porque la dirección regional del Serviu no hizo bien la pega. Para eso nos daban diez días, pero muchas veces los documentos demoran diez o veinte días”, señala Rodecindo Cárdenas, vecino del sector de Rofuco Alto.
Tras ir a esta dependencia algunos vecinos fueron a la Municipalidad, donde “el alcalde (Saturnino Quezada) cerró su puerta y no recibió a nadie. Estamos desilusionado de nuestras autoridades. Cuando son candidatos es distinta la cosa”, agregó Cárdenas.
Lo único que se logró es fijar la visita de la directora regional del Serviu, Nebenka Donoso, a La Unión la próxima semana. “Hoy día nos dieron un paracetamol para tranquilizarnos, pero la directora tiene que resolver la situación”, mencionó Ximena Lara, representante de las familias de Carimallin en Río Bueno.
Otro hecho que aumenta la molestia de los vecinos es que en una reunión el viernes pasado en la Municipalidad de La Unión no llegó ningún representante del Serviu, el municipio, ni otra entidad pública. “Acá hay muchos adultos mayores. Para ellos es difícil andar en estas reuniones y muchos más realizar todos los trámites necesarios”, señaló Lara.
“No porque seamos campesinos nos vamos a dejar pisotear. Merecemos respeto como cualquier persona. Somos chilenos como cualquier persona”, finalizó Cárdenas.
