La corrupción no se ha ido de esta comuna, solo se había replegado. Tres años después de las primeras denuncias realizadas por concejales, y tras investigaciones que nuestro medio ha seguido con rigor, nuevos antecedentes ponen contra las cuerdas al actual alcalde de Río Bueno, Luis Reyes Álvarez (UDI). Hoy, su figura emerge en el centro de una red de transferencias sospechosas, depósitos en efectivo y adjudicaciones multimillonarias que han encendido las alarmas judiciales.
Un reciente reportaje del programa “¿Hasta Cuándo?” de Mega, respaldado por documentación que Diario El Ranco ya había expuesto en 2023, reavivó un caso que mezcla negocios turbios, dineros públicos y relaciones impropias. El punto de quiebre: 20 transferencias bancarias por un total de $15 millones realizadas por Elizabeth Rosas, secretaria del empresario Héctor Meza —el mismo que entre 2017 y 2018 recibió contratos por más de $1.800 millones desde el municipio.
Consultado por el equipo de Mega, Meza primero negó todo, luego reconoció “asesorías” de Reyes. El alcalde, por su parte, esbozó una tibia defensa: “Puede ser, soy profesor de educación física. Si me piden asesorías deportivas o por mi experiencia en lo público o en bancos, lo voy a hacer”.
Pero la investigación no se detiene ahí. Las cartolas bancarias de Reyes —revisadas tras el alzamiento del secreto bancario— revelan depósitos en efectivo por $174.198.376 entre 2017 y 2023, incluyendo $22 millones provenientes de funcionarios municipales. Todo esto, mientras recibía su salario como edil, que en mayo de 2021 ascendía a $5.500.000 mensuales.
Entre los casos emblemáticos, resurge el sobreprecio de más de $500 millones en la obra del talud de la cuesta Beauchef, adjudicada a José Luis Accardi, exseremi de Piñera sin experiencia ni capital. Lo más grave: Accardi depositó dinero al hijo menor de edad de la comisaria de la PDI Sandra Verdejo, quien terminó siendo suspendida, y cuya brigada debió marginarse de la causa.
La situación llegó a tal punto que el juez Pierre De Baeremaecker apercibió al Ministerio Público por inacción. “Constando que no se han realizado gestiones útiles, apercíbase al Ministerio Público para que en cinco días indique el estado de la carpeta investigativa”, dictó en junio de 2024. Ahora, con la fiscal María Consuelo Oliva al mando, se espera que lleguen las primeras formalizaciones.
Y no solo Reyes está bajo la lupa. Carolina Silva, exalcaldesa independiente pro UDI, también aparece en la investigación. Recibió depósitos en efectivo por más de $116 millones, sumados a $30 millones adicionales entre 2021 y 2023, fuera de su remuneración como jefa comunal.
La Fiscalía incautó centenares de documentos, y los peritajes contables están en curso. “Es mucha la información”, explicó la fiscal Oliva, anticipando que “cualquier operación sospechosa será investigada y sopesada”.
Mientras tanto, el alcalde Reyes —interpelado por concejales en sesión pública— solo pide calma. “No me referiré a los antecedentes por respeto a la fiscal”, declaró.
Pero la comunidad ya no espera palabras. Es tiempo de hechos. Y de justicia.
