Un total de 103 armas blancas de fabricación artesanal y 8 teléfonos celulares fueron incautados en los módulos 42, 44 y 54 del Complejo Penitenciario de Valdivia luego de la realización dos operativos de registro y allanamiento extraordinarios regionales y un operativo nacional.
Ejecutados por personal del establecimiento penitenciario y por funcionarios de la Unidad de Servicios Especiales Penitenciarios (USEP) las instancias de fiscalización fueron realizadas en un periodo de tiempo de una semana y abarcaron una población penal de 549 internos.
El Director Regional de Gendarmería en Los Ríos, coronel, Rafael Rojas, mencionó que “para nosotros como Gendarmería es necesario resguardar el régimen interno de cada una de las unidades y en este caso del Complejo Penitenciario de Valdivia. Para ello una labor clave son los operativos de registro y allanamiento que se realizan a fin de detectar elementos prohibidos que estén donde en manos de los internos o en los espacios que habitan, buscando disminuir la ocurrencia de hechos de violencia que pueden ser entre internos o en contra de nuestros funcionarios”.
Cabe consignar que el registro corporal realizado a los internos permitió identificar a tres de ellos portando un aparato móvil, por lo cual personal de Gendarmería realizó la denuncia al Ministerio Público ya que la Ley 21494 sanciona penalmente a quienes ingresen teléfonos celulares a los establecimientos penitenciarios.
El Director Regional de Gendarmería en Los Ríos, coronel, Rafael Rojas, mencionó que “para nosotros como Gendarmería es necesario resguardar el régimen interno de cada una de las unidades y en este caso del Complejo Penitenciario de Valdivia. Para ello una labor clave son los operativos de registro y allanamiento que se realizan a fin de detectar elementos prohibidos que estén donde en manos de los internos o en los espacios que habitan, buscando disminuir la ocurrencia de hechos de violencia que pueden ser entre internos o en contra de nuestros funcionarios”.
Este tipo de operativos se realizan constantemente en el recinto penitenciario a fin de mantener el control y la seguridad de los espacios carcelarios.
