Después de casi tres años con sus puertas principales cerradas, la iglesia San José de La Unión —con más de cien años de historia— inicia una emotiva campaña ciudadana para su reapertura y recuperación estructural.
El objetivo: reunir los primeros 45 millones de pesos necesarios para reparar los pilares principales del campanario y devolver la estabilidad a esta joya arquitectónica y espiritual de la comuna.
“La iglesia ha sido parte del patrimonio arquitectónico de La Unión, y creemos que hoy más que nunca es momento de unirnos para devolverle su lugar en el corazón de la ciudad”, señaló el padre Luis Gallardo, párroco de la comuna.
La primera etapa del proyecto busca reforzar la estructura del campanario —de 25 metros de altura— para garantizar la seguridad del templo y permitir su reapertura por la entrada principal de Avenida Arturo Prat.
“Queremos volver a ofrecer a la comunidad un templo abierto. Más allá de lo religioso, este espacio es un signo de esperanza, de encuentro, de consuelo. Un templo abierto nos recuerda que cada hora es un regalo de Dios y que en medio del ajetreo diario, hay que volver la mirada al cielo”, agregó el sacerdote.
Además, el padre Gallardo expresó el profundo significado simbólico de esta obra para la ciudad:
“Es importante esta iglesia porque es un signo de la comunidad, más allá de los católicos. Un templo abierto siempre nos habla de Dios que nos acoge. Un templo abierto en el corazón de la ciudad nos habla de que para Dios todos somos importantes. Un templo abierto para el culto nos recuerda que Dios es importante. Aquí la comunidad de La Unión es creyente, somos hombres o mujeres de fe. Más allá si son católicos o de otras confesiones cristianas. Por lo tanto, en el corazón de la ciudad, este templo nos recuerda que Dios es importante.”
Actividades para reunir los fondos: solidaridad y creatividad en acción
Encabezando con entusiasmo la campaña está Ingrid Mundaca, coordinadora general del proyecto, quien junto a un equipo de más de 15 personas impulsa una serie de iniciativas para lograr el objetivo. “La primera actividad será la entrega de sobres en la comuna de La Unión y sus alrededores, para recibir aportes voluntarios. Daremos un plazo de una a dos semanas para recogerlos”, explicó Mundaca.
Además, se dispondrán alcancías en locales comerciales que deseen sumarse a la causa. A fin de mes, se realizará un gran completón en diferentes puntos estratégicos de la ciudad.
La comunidad también podrá disfrutar de una nueva empanatón, cazuelas en sectores rurales, una esperada fiesta de los años 80, un desfile de moda con una reconocida marca nacional, una once especial para damas, actividades de colorimetría y ferias para mujeres, entre muchas otras sorpresas.
“Tenemos incluso una actividad maravillosa que aún no puedo revelar del todo, pero que anunciaremos muy pronto. Queremos que la comunidad se mantenga expectante y con ganas de participar”, agregó Ingrid. Además, extendió una invitación abierta: “Si alguien tiene una idea creativa para recaudar fondos, estamos totalmente disponibles para escucharla y llevarla a cabo. Esto lo hacemos entre todos”.
Una invitación a reconstruir juntos
La campaña contempla el compromiso no solo de fieles, sino de toda la ciudadanía. Porque un templo abierto en el corazón de La Unión es también símbolo de unidad, memoria, identidad y esperanza.
Desde ya, se extiende el llamado a los vecinos, comerciantes, autoridades y empresas locales para aportar con su granito de arena. Porque reconstruir el campanario es también reconstruir un símbolo de fe y comunidad para todas y todos.