Durante la exposición realizada en el concejo municipal por la empresa encargada del proyecto eólico “El Rancho”, que busca instalar 30 aerogeneradores de 260 metros de altura en los sectores Los Esteros, Cordillera, Huape, Roy-Roy, Pilmaiquén, Los Leones, Los Chilcos y Puñumán, el alcalde de La Unión, Saturnino Quezada, expresó su rechazo a la iniciativa y llamó a reflexionar sobre sus impactos sociales, ambientales y productivos.
“Nuestra ciudad está siendo una zona de sacrificio, y eso es verdad. Pero también debemos pensar en nuestros vecinos, en los pequeños agricultores, en la gente que tiene dos o cinco hectáreas”, señaló la autoridad comunal, enfatizando que los proyectos energéticos deben considerar el bienestar de toda la población y no solo el interés económico de algunos.
El jefe comunal agregó que el proyecto se emplazará sobre zonas extensas donde predominan productores ganaderos, muchos de los cuales —advirtió— han sido atraídos por los beneficios económicos que las empresas ofrecen, sin una verdadera conciencia social sobre los impactos que estas torres generarán en su entorno.
“Aquí no se está pensando en la comunidad ni en el desarrollo sostenible del territorio, sino en el dinero que deja la instalación de estas estructuras en los campos. Eso no puede ser el futuro de La Unión”, afirmó Quezada.
Finalmente, el alcalde reiteró su posición: “Rechazo este tipo de proyectos, porque nuestra ciudad no es una zona de sacrificio. No sé cuál es el interés que tienen en esta ciudad capital de la provincia del Ranco, pero yo rechazo, rechazo totalmente”.
El proyecto eólico “El Rancho” ha generado preocupación en distintas localidades de la comuna, donde vecinos organizados en el movimiento “Ranco Sin Eólicas” manifiestan su oposición, argumentando que la instalación de aerogeneradores afectará el paisaje, la fauna, la tranquilidad de los sectores rurales y la calidad de vida de sus habitantes.