Felices están los integrantes de esta organización, que ya ven cumplido después de tres largos años trabajando, uno de sus sueños más queridos: que es el de tener finalmente personalidad jurídica. Situación que de ahora en adelante les permitirá postular a proyectos y hacer crecer esta loable organización que sólo busca ayudar a las personas que han perdido de forma trágica o dolorosa, a un hijo o a un ser querido.
Conversamos con Andrés Chavarría, líder de esta organización social y estas fueron sus impresiones al momento de consultarle acerca de este momento que estaba viviendo:
«Gracias a esto, podemos ahora postular a proyectos y tener el apoyo del municipio. También armar nuestros equipos de trabajo, ya que el fuerte de nosotros no es tener grandes cosas, sino que es ayudar espiritualmente al alma y tratar de sanar y acompañar el proceso de duelo; siempre hemos pretendido que este sea un proceso sanador y positivo y no se transforme en un duelo negativo y patológico que lo va a llevar el resto de la vida».
«Queremos agradecer a ElRanco.cl, por darnos a conocer a través de una nota que nos hicieron hace tiempo, cuando hicimos nuestra primera misa y donde comenzamos nuestras actividades. Estos nos ayudó a salir del anonimato y ahora hay muchas personas que están interesadas en ingresar a nuestras organización. Les agradezco de todo corazón, he recibido muchos llamados telefónicos, inclusive fuera de la comuna”.
Por lo mismo y debido a este feliz acontecimiento, también quisimos conocer de otras impresiones dentro de la misma organización. En esta oportunidad, fue la de Dina Carrillo, una de las monitoras que trabaja para esta asociación y en la que lleva tres años participando y colaborando: “yo he estado aquí para apoyar con Andrés, a los papás que están sufriendo, porque yo también sufrí la pérdida de un hijo. Ahora ayudo como monitora y salimos a auxiliar a personas que están sufriendo dolor por la pérdida de un hijo o de un ser querido. Nosotros les llevamos paz y tranquilidad a los familiares, ya que nosotros hemos vivido el dolor que ellos tienen.»
Osvaldo Vásquez Orellana sufrió la pérdida de su hija de 14 años en un accidente. Este hombre, que integra esta agrupación, quiso entregar su experiencia a la comunidad: “yo llevo como tres años en esta agrupación y bastante me ha ayudado. Nos ha unido como familia, hemos estado como grupo familiar se puede decir, pues somos todos conocidos y nos ayudamos mutuamente”.
“Yo invito -continuó- a más personas, a que vengan y se integren a esta gran familia que componemos esta agrupación. Yo sé que es difícil, sobre todo cuando fallece un hijo. Uno como papá no espera la muerte de un hijo, sino que uno como padre se vaya primero. Bueno, la circunstancia de la vida es así, mi lolita tenía 14 años cuando me la atropellaron, no tengo rencor contra nadie, solamente hay que seguir luchando, esto no se olvida, nuestra hija siempre estará en nuestros corazones», finalizó.