Jefe Nacional de Subvenciones junto a Seremi de Educación inspeccionan colegio valdiviano y destacan el nuevo modelo de fiscalización

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*Autoridades del Mineduc catalogaron al Instituto Príncipe de Asturias de Valdivia como un colegio modelo a seguir en cuento a infraestructura, normativa de seguridad, certificación profesional de sus profesores, entre otros aspectos.

*Además, detallaron el nuevo modelo de fiscalización que comenzó a implementarse desde este año, dando a conocer el aumento de sanciones y multas de los últimos años.

Hasta el Instituto Príncipe de Asturias de Valdivia llegaron esta mañana el jefe nacional de subvenciones, Manuel Casanueva y el seremi de Educación, Carlos Crot para desarrollar una visita inspectiva al recinto educacional. Las autoridades hicieron el recorrido que deben realizar los fiscalizadores de Mineduc en cada visita a los establecimientos: revisaron la infraestructura, la existencia de señalética, extintores, barandas, la demarcación de zonas de seguridad, baños, como también aspectos administrativos como los certificados de título de los profesores, el correcto registro de asistencia a clases y la existencia del manual de convivencia.

 

“Podemos decir con mucho orgullo que este establecimiento está cumpliendo con la normativa, y que por lo tanto tiene los requisitos necesarios para entregar una educación de calidad. Necesitamos que los papás exijan dentro de los establecimientos de los cuales son apoderados, que funcionen de acuerdo a la normativa establecida”, indicó Casanueva.

Asimismo, explicó el nuevo modelo de fiscalización que comenzó a implementarse desde este año y que pretende avanzar en el aseguramiento para que los profesores y los niños cuenten con las condiciones óptimas para desarrollarse.

“Como Mineduc, nuestro objetivo es lograr de que hayan exigencias mayores; sanciones oportunas y justas, de manera de cambiar las conductas de los sostenedores que no estén haciéndolo bien. Hemos ido aumentando la cantidad de sanciones desde el 2009 a la fecha. Pasamos de mil a 5 mil sanciones, lo que en términos monetarios se traduce en cerca de 700 millones de pesos el 2009 y el año pasado, 3 mil millones de pesos. Hasta la fecha, llevamos 2 mil 500 millones de pesos por concepto de multa por sanciones de incumplimiento de normativa. Esto demuestra nuestra preocupación para que efectivamente se cumplan las normas y que los establecimientos mejoren”, expresó.

El Ministerio de Educación se está enfocando en fiscalizar con mayor intensidad los establecimientos riesgosos o condicionales en función de patrones históricos de información. Este año, se registran a nivel nacional 400 establecimientos condicionales que han incumplido una serie de normativas, cifra de la cual corresponde un 5,9% a la región de Los Ríos.

Por su parte, el seremi de Educación hizo un llamado a los padres a que se involucren y sean parte de la comunidad escolar al cual pertenecen sus hijos, recomendándoles visitar habitualmente el recinto y revisar sus instalaciones. “Es clave contar con la participación de los apoderados donde ellos también tienen el derecho de fiscalizar y denunciar el incumplimiento página web www.ayudamineduc.cl; teléfono 600 600 26 26 o bien dirigirse a las Direcciones Provinciales de Educación.

 

Eficiencia

 

Otro aspecto en el que se ha trabajado es en la eficiencia del proceso, es decir, el tiempo que pasa entre una visita y la ejecución de la sanción cuando corresponda. Antes de 2010, la demora era de seis meses e incluso años, lo que se traducía, muchas veces, en la prescripción y en la no aplicación de esa sanción. En 2011 se alcanzó un promedio de 75 días y para este año la meta es bajar de los 45 días y para los procesos sencillos una demora de siete días.

 

Este modelo busca avanzar en la estandarización de las infracciones, es decir, se categorizaron las faltas y ahora los fiscalizadores tienen un listado claro con el cual cotejar lo que encuentren (hallazgos) en el colegio. La fiscalización está enfocada en los aspectos más sensibles (como la asistencia, el estado de los profesores, la higiene, la seguridad del recinto y la rendición de cuentas), por lo que se alcanza a fiscalizar con mayor profundidad cada área.

 

 

 

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