La actividad que se desarrolló en los salones del Hotel Melillanca, contó con la presencia de directores y docentes, quienes pudieron revisar en detalle la Circular Nº2 –enviada en el mes de mayo por la Superintendencia de Educación Escolar- que imparte instrucciones sobre requisitos, plazos y exigencias, que deben ser cumplidas por los planteles educativos para mantener el reconocimiento oficial del Estado.
En la jornada, se abordaron temas relativos a infracciones y sanciones, reconocimiento oficial, registros de matrícula, libro de clases, procesos de admisión, requisitos de ingresos de alumnos y planes de estudio.
Ana Victoria Ahumada, directora regional del organismo fiscalizador, señaló que “todos los establecimientos educacionales de la región deben estar informados y actualizados de la normativa. No podemos fiscalizar por programas a establecimientos particulares pagados, pero si podemos solicitar antecedentes en caso de recibir alguna denuncia o reclamo, y por ello deben estar cumpliendo con lo exigido”.
La directora agregó que durante el 2013 se han recibido 3 denuncias que involucran a colegios particulares pagados, y todos han sido categorizados en la línea de maltrato escolar.
“Si bien este tipo de establecimiento no tienen la obligación de contar con un consejo escolar, por ley deben crear un comité de sana convivencia que será el encargado de trabajar en conjunto con el encargado de convivencia frente a situaciones de conflicto. Debe existir un reglamento interno y un plan de gestión, constituyéndose en instrumentos de carácter preventivo e informativo”, dijo.
En la reunión, se aprovechó de informar que las escuelas, colegios o liceos, deberán revisar a lo menos una vez por año a toda persona que cumpla alguna función dentro del establecimiento, en el registro de inhabilidades para trabajar con menores de edad.
“No contar con lo anterior puede acarrear además de una responsabilidad administrativa, una eventual responsabilidad civil y/o penal”, señaló.
Al finalizar, el organismo informó sobre los procesos de denuncias y las materias con mayores reclamos en la región. “La idea principal era mostrar el proceso en cuestión, desde que ingresa una denuncia hasta la forma como se solicita información a los planteles educacionales. Además profundizamos en el reglamento interno y en los manuales de convivencia, para que así situaciones de conflictos no lleguen necesariamente a transformarse en procesos administrativos”.”, puntualizó Ahumada.
